sábado, 3 de noviembre de 2007

ICC. Auge y Caida de La mafia del Cuerno (parte primera)

Babilonia sometió a los pueblos bárbaros. Y Babilonia
fue derruida hasta los cimientos.



Puede parecer un despropósito, pero asimilar la fusión ICC – A21, o intentar concebirlo como un choque de culturas tiene asideros de realidad, aunque mas que fusión fue el limpio engullimiento del uno por el otro, en un acto de canibalismo entre portales de ajedrez. Probablemente la cita que encabeza está nota, no sea certera o carezca de rigor histórico, pero sirve para reproducir lo que ocurrió con los contingentes y hordas venidos desde el A21, al ingresar y, a la pasada, someterse a los designios y reglas del todopoderoso imperio de Marty Grund. Nótese si, que en el caso se da una curiosa paradoja, que la colonización se dio en los feudos y dominios del invasor, esto origina peculiaridades de difícil digestión. Abstrusos, severos, pero fiel posesos de esa dicotomía feraz que marcan los procesos de verdadero cambio. Bajo esa inextricable capa que separa la verdad oficial de las versiones underground y la escatología diversa, anida una interpretación paralela de los hechos y vivencias. Seria, soportable y enteramente creíble.

La historia

De las muchas versiones respecto a las razones de la agonía y ocaso del A21, aquel gigante del ajedrez hispano latino que asomaba su nasa por los horizontes virtuales como serio competidos de Fritz y el ICC, me quedo con la que dos años atrás fue plasmada en una nota que circuló por el internet, y que reproduciré prontamente en un artículo. Como sea, la síntesis del proceso, resultaba ser que la alcancía que recogía las monedas del mundo latino del ajedrez, no alcanzaba para alimentar la legión rusa de Ian y la mafia del viejo Sher. A21 simplemente colapsó por los viles y cochinos pesos. Nada de historias de faldas o hackercillos misteriosos. Money. Money. Money … Eso generó la diáspora del pueblo latino de los trebejos a diversos portales, y su paso fugaz por las arenas del ICC. Allí fue sometido por el peso de regulaciones a lo sajón, y que distaban universos de las reglas del fenecido portal de Illescas. Eso, porque la mecánica de funcionamiento de un portal de ajedrez yankee, pese a su rigor plasmado en simples reglas, resultaba incomprensible para el usuario latino acostumbrado a lo permisivo de los portales españoles. El salir de las cálidas pantallas del A21 y llegar al sombrío Blitzin 2.5 resultó para algunos un ejercicio agobiador, de imposible digestión y casi espeluznante. En la cosmogonía personal de Grund y el resto de los sajones, jugar ajedrez por Internet, es un conjunto de conductas rayanas en el cretinismo de una disciplina absurda. Para ellos esta práctica se reduce a una secuencia de conductas iteradas desde los orígenes de las plataformas del juego hasta el infinito. Conectarse a la red, decir hi, tragar un par de peones, expresar de vez en cuando thk for the game y luego bye. Nada de conductas transgresoras, cero recuerdo a madres y hermanas de los ocasionales rivales. Cuando esto llega a ocurrir, el juicio es sumario y la pena lapidaria. Así el pueblo latino debió asimilar que en ICC se tiene una sola muerte. Que cuando un nick cae en desgracia es su fin y contra ese funesto designio no hay nada que hacer. No lo era tanto en el latinizado a extremo A21, con múltiples resucitaciones, reglas plásticas y con usuarios dados a las mil y una derivaciones del uso del multi nick. Queda claro entonces, que todas esas hordas de usuarios, seguro no estaban preparados para someterse a ese vasallaje tan disímil y contrastante con sus anteriores experiencias.
La pregunta natural, es si el colonizador estaba preparado para dominar por entero al pueblo ajedrecístico latino. El tiempo dio respuesta exacta a esa duda. Lateknight y su gente ni siquiera imaginaron el infierno que compraron y pronto ICC, cual moderna Babilonia del Ajedrez, fue removida hasta sus cimientos, sólo salvó de su destrucción por una conjunción de hechos que en una concatenación imprevisible, mágica e inesperada, se dieron en ese verano de Pittbourgh de 2006, por lejos el año mas nefasto para el portal de Grund y Petersen. Aun peor que aquel en que los que construyeron ese portal, reclamaron su exclusión de un proyecto hecho por gente del tablero, pero que a la hora de transformar la idea en un ente comercial fueron simplemente expulsados a patadas.

Pero esa es otra historia ……..

La migración


Había visto el vocablo este para describir hábitos de cacatúas, gaviotas y otros plumíferos. Seguro fue el viejo Sher, que lo injertó en la jerga de los hombres de los trebejos para describir el proceso de traspaso de usuarios desde el 21 al ICC. Aquel donde el contingente latino de amantes de alfiles y torres fue usado como moneda de cambio, en el proceso llevado por Illescas y sus boys de sacarse de encima la costosa mancorna que significa Nevzorov y su mujer para las arcas del CET. Fue quizás un error de Illescas, aunque no el mayor, al asumir que todos los usuarios del 21 estaban dispuestos a asumir el papel de mercancía o borregos en sus negocios personales. Tío Miguel, experto en dilucidar los trances de caballos, peones y torres en los 64 escaques, no fue capaz de darse cuenta, que en ese procesó debió desprenderse del lastre que hace rato venían significando, la gente que usaba y usufructuaba de su fama ajedrecística y sus títulos en la madre España, y en la indolente concepción que podría imponer sus términos, gracias al capital humano de miles de potenciales usuarios, pudo proseguir sus derroteros por los caminos del ajedrez por Internet, aunque, como se verá, su cuerpo de edecanes, sacristanes y agregados, casi aniquilan al Internet Chess Club.

Vuelvo un momento a eso de la migración. Cuando ya es sabido y reconocido, que la vociferada fusión ICC – CET, fue la gran bosta ajedrecística del 2006 y muchos preferirían sepultar bajo el alquitrán tal vergonzoso episodio, hay recursos de la web que se esfuerzan en recordarlo y mantenerlo presente a la vista de todo mundo. Gracias a eso, quienes a su tiempo disentimos de esos hechos pasados, podemos en el presente referirnos con propiedad a esos temas, certificar la corrección de nuestros asertos y refregarlo en los lomos de aquellos a quienes se los hicimos ver a su debido tiempo, y que dejaron, indolentes, que el agua siguiera corriendo hasta sofocar los sistemas.

El sitio http://www.archive.org/ es uno de esos recursos. Si uno completa el campo para búsqueda con la dirección ajedrez21.com, tendrá a su disposición el contenido de la portada de la web en una determinada fecha del pasado. Así se puede practicar un tour desde el crash del 18 de Enero de 2006, cuando la página colapsó misteriosamente, pasando por las explicaciones oficiales del día 26 hasta el inicio del proceso de cambio de nicks con el ICC. Podrá verse igual el colosal conteo del 14 de Febrero donde se afirma que eran 10000 los asociados del A21 que habían aceptado ser subyugados por el ICC. Se podrá apreciar también, el vertiginoso quehacer de la monstruosa calculadora del viejo Sher que había incrementado tal guarismo a unos 15000 algunas semanas después.

¿Dónde están ellos?.

Quien tenga una respuesta alternativa que hable ahora o calle para siempre. Miles de ellos, fueron aniquilados sistemáticamente por las sajonas reglas de funcionamiento del sitio. Y en ese proceso de exterminio se sumó un elemento perverso y de delirante sevicia. La manifestación de las miserias de las personas. Allí las antiguas pugnas, los odios y rencores de gente del 21, de aquella que controlaba los martillos del sitio, por quienes años atrás habían osado enfrentarlos, y peor que eso, los habían vencido a mano limpia, encontraron terreno propicio para que aquellos pudieran cobrar sus pequeñas venganzas personales.

(ejemplar sin correciones)
Próximas entregas

Las reglas sajonas
Berowne o La Ira

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